Por: Marco Antonio Aguilar Cortés
Al parecer, todo el proceso legislativo para la reforma al Poder Judicial Federal está atiborrado de violaciones a nuestra Constitución y, por ello, la Juez del Distrito Décimo Noveno, con sede en Coatzacoalcos, Veracruz, Nancy Juárez Salas, dictó y firmó un resolutivo ordenando a la presidente de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y al director del Diario Oficial de la Federación Alejandro López González, para que en el término de 24 horas eliminen la publicación de la llamada reforma judicial, previniéndoles que, de no obedecer, se les aplicarán las penas que para esos casos de incumplimiento se disponen en la Ley de Amparo.
La reacción de la presidente Sheinbaum, ante ese mandato judicial, fue flanquearse por dos colaboradores que, siendo abogados (Ernestina Godoy y Arturo Zaldívar), le aconsejaron responder con disparates políticos, en lugar se ceñirse a estricto derecho.
Así, Sheinbaum con lenguaje terso, pero amenazante para la titular de ese juzgado, señaló: “La juez no tiene atribución para solicitar que se quite del Diario Oficial de la Federación esta publicación; esta juez no tiene sustento, no está por encima del pueblo de México, y se extralimita; debe leer el artículo 61 de la Ley de Amparo. No vamos a bajar la publicación, por el contrario, vamos a hacer una denuncia de esta juez al Consejo de la Judicatura, para que quede antecedente de lo que hace, y se le sancione”.
El artículo 61 de la Ley de Amparo tiene XXIII fracciones, pero seguro que la presidente se refiere a la fracción I: “El juicio de amparo es improcedente… contra adiciones y reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”.
¡Atención presidente Sheinbaum!, esa fracción I se refiere exclusivamente al juicio de amparo, Así que contra esas adiciones y reformas sí proceden las controversias constitucionales, y las acciones de inconstitucionalidad.
¡Atención presidente Sheinbaum!, en la realidad jurídica puede darse una variante muy amplia de casos respecto a esas adiciones y reformas. Señalaré sólo un ejemplo, a un juez, a un magistrado, o a un ministro, o a algún trabajador administrativo del PJF, a quienes se les aplique de manera retroactiva esas adiciones o reformas, tienen legitimidad para promover el juicio de amparo, no por ser adiciones o reformas, sino por aplicarse de manera retroactiva en perjuicio de un quejoso, violando su derecho humano garantido por el artículo 14 Constitucional: “A ninguna ley se le dará efecto retroactivo en perjuicio de persona alguna”.
¡Atención presidente Sheinbaum!, es necesario aplicar una certera hermenéutica en nuestra Carta Magna, ya que procede el juicio de amparo en contra de procedimientos inconstitucionales que hayan provocado adiciones y reformar a nuestra constitución federal, con las que se alteren sus principio básicos y esenciales protegidos por ese principio de inviolabilidad constitucional establecido en el artículo 136 de nuestra Carta Magna.
En mi opinión, la Juez Nancy Juárez tiene atribución legal para suspender actos reclamados, y uno de ellos es suspender esa publicación en el Diario Oficial y sus efectos, cumpliendo a cabalidad su deber jurisdiccional en el caso; mientras que Usted, presidente Sheinbaum, está incumpliendo como autoridad responsable.
La Juez sí tiene competencia para admitir y resolver en este juicio, y su suspensión tiene nivel profesional; mientras que la presidente Sheinbaum transgrede, con el mal uso de un poder presidencial, los derechos humanos garantidos de la parte quejosa, tratando, además, de avasallar a una Juez digna y respetuosa, en el ejercicio de su labor jurisdiccional.
La Juez Nancy, al realizar con precisión sus atribuciones, cumple con el pueblo al ejercer la soberanía popular otorgando la suspensión y haciéndola valer como eficaz resolutivo; en cambio, la presidente Sheinbaum traiciona al pueblo al no sujetarse al estado de derecho que protesto respetar y hacer que se respete.
La Juez, firme y con humildad de servidora pública, ha respetado a la presidente Sheinbaum; y, ésta, pletórica de soberbia y poder, amenaza a la Juez con castigarla.
Las malicias de la presidente Sheinbaum, al paso de los días, se observan con mayor claridad, recrudeciéndose; y pronto sus milicias saldrán a reprimir a la población opositora.
Entiéndalo hoy, presidente Claudia, sus disparates recalentados (reforma judicial, inseguridad pública, falta de crecimiento económico) van a estallar en su mandato, perjudicándonos a todos.
Suprima su malicia. Ajuste a su milicia, a la Constitución, porque el día de mañana será demasiado tarde.