Por: Martha Elba Torres Martínez
En el enredo de mentiras, traiciones y complicidades sobre el “Mayo” Zambada, y apenas comienzan a construirse los casos en Estados Unidos como en México, el mismísimo Presidente saliente, la Presidenta electa, y 29 gobernadores en funciones y electos, y hasta el todavía dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, cerraron filas en torno al mandatario sinaloense, Rubén Rocha Moya, con quien el narcotraficante habría de reunirse, ese 25 de julio, en Huertos del Pedregal, Culiacán.
“Rechazamos tajantemente los falsos señalamientos realizados supuestamente por el señor Ismael Zambada García a través de su defensa legal, que pretenden vincular, sin éxito, al gobernador Rocha con esta persona detenida el pasado 25 de julio”, escribieron en su manifiesto del pasado lunes.
El Club de los Cínicos, arropando a quien, como candidato a gobernador en 2021, admitió abiertamente en entrevistas con Carlos Loret de Mola y Salvador García Soto, que no se negaría a buscar la forma de coordinarse con el “Mayo” para bien del estado. “No tengo ataduras ni telarañas”.
“Hay que buscar una forma de hacerlo, los gobiernos en general niegan cualquier acercamiento o plática con los delincuentes, sin embargo, hay una cosa: los contactos se hacen de personeros del gobierno con el narcotráfico, con los delincuentes; en ese sentido, de coordinarse, hay que diseñar una política de Estado que no sean los personeros del Gobierno, sino que sea una política de Estado que se respete y que se reflejen las leyes”, le dijo a Carlos Loret. “La ley se viola, cuando se hacen relaciones y pactos oficiales, por lo (tanto) hay que revisar la ley”.
García Soto, en su columna de El Universal, narró una conversación con el entonces candidato morenista: ¿Cómo se gobierna un estado con un cártel tan poderoso? –“No nos hagamos pendejos”, reconoció que en aquel estado las cosas funcionan de una forma diferente, pues deben de pedirle el apoyo a los grupos criminales y que si algún político niega tener el visto bueno de ellos, miente. “Yo fui y hablé con ellos, los conozco porque soy de Badiraguato”.
El columnista aseguró que fuentes internas de Morena le confirmaron que Rocha Moya tuvo un papel importante para la creación de un puente de comunicación entre los grupos criminales y candidatos de las regiones del Golfo y Pacífico (2021) para conseguir financiamiento y apoyo en las campañas de morenistas para que se hicieran del poder, lo cual está documentado por las indagatorias de Estados Unidos, sobre el caso Carmona -en el que esta involucrado Mario Delgado- y sus ramificaciones con los cárteles de la droga.
Así las cosas, ¿quién, del Club de los Cínicos, tiene las manos limpias comenzando por el adorado “cabecita de algodón”, el presunto narcodinero en sus campañas, sus visitas -públicas y secretas- a Badiraguato, la liberación en 2019 de Ovidio Guzmán? ¿Mario Delgado, que será titular de la SEP con Claudia Sheinbaum aun con acusaciones en su contra en EU por tráfico ilegal de gasolina, junto con Américo Villarreal? ¿Alfonso Durazo, Cuauhtémoc Blanco, Evelyn Salgado, Alfredo Ramírez, Ricardo Gallardo, Rutilio Cruz, Cuitláhuac García y Layda Sansores, tienen calidad moral para hablar por la honestidad y probidad de “su compañero”?
Tiene toda la razón la próxima presidenta cuando dice que desde 2018 en México, cambió la forma de gobernar: desde entonces gobierna la mentira, el robo y las traiciones. La ciencia es evidencia, no democracia.
Porque -y no se trata de ser ave de mal agüero-, AMLO, Claudia y todas y todos los del Club de Cínicos, pueden creer que con su sola palabra y exculpación, Rubén Rocha Moya ya la libró y seguirá como nada, feliz de la vida.
Por lo que se sabe del mundo del hampa, la traición es el peor de los pecados. Y al “Mayo” lo traicionaron el gobernador Rubén Rocha, los Chapitos y vayan ustedes a saber hasta dónde sube la cadena de complicidades; regaron sangre, con el homicidio del diputado federal electo, Héctor Melesio Cuén, y seguramente de los cercanísimos escoltas del capo: el comandante de la Policía Judicial, José Rosario Heras y Rodolfo Chaidez. Del piloto y la aeronave, quién sabe qué pasó.
No hay que ser adivinos para presentir de esta calma chicha. Lo que más tienen los malosos son paciencia y especulo que todos, por eso de que a río revuelto ganancia de pescadores, están a la expectativa de que las cosas se aclaren y entonces sí, pasar facturas y ajustar cuentas.
Porque esto va mucho más del prestigio y credibilidad de un mortal gobernador de Morena. Hablamos de la frágil gobernabilidad y paz en todo el país, particularmente en la frontera norte, por los acuerdos o desacuerdos con el resto de los cárteles; las bandas criminales se multiplican como hongos en temporal y hasta la frontera sur se libran cruentas batallas.
De acuerdo a The Wall Street Journal (WSJ), a lo largo de la frontera norte de México, las distintas facciones del Cártel del Pacífico se preparan para una intensa “guerra” en la que otras organizaciones criminales de México podrían intervenir, por la traición de los Chapitos al “Mayo”.
A partir de versiones recogidas por el periodista José de Córdoba, el cártel del Chapo pondría contar con un estado de fuerza de cinco mil sicarios, en tanto el hijo y heredero aparente de Zambada, Ismael ‘Mayito Flaco’ Zambada, con un ejército menor, pero cuenta con las alianzas que su padre hizo con otros grupos criminales a lo largo de sus 50 años de carrera delictiva. Cuentan colegas de Sinaloa, que nada más esperan el sonar los tambores de guerra.
Claudia Sheinbaum aprovechó su unción como Presidenta electa en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para mandar un mensaje muy breve pero de mucho contenido al narcotráfico: “no regresará la guerra contra el narco. Seguiremos construyendo paz con justicia”.
O sea, seguirán los abrazos a los criminales y la estrategia no cambiará. En tanto López Obrador se irá -es un decir- con la aclaración reiterada de que su gobierno no entregó a Estados Unidos, al “Mayo”. Quién sabe quién fue.
El Club de los Cínicos…
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Si así se explica la defensa férrea de Rubén Rocha Moya, cómo no la del ex gobernador panista Javier Corral, a quien el mismísimo fiscal General de la Ciudad de México, el morenista Ulises Lara, rescató antenoche, de la ejecución de una orden de aprehensión por parte de personal de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua.
Ya es evidencia porqué Corral y tantos ex gobernadores que eran de oposición, se sumaron a Morena: cobijarse bajo el manto de la impunidad e inmunidad que tejió AMLO para agrandar su rebaño de pecadores.
En Chihuahua dejó pendientes como gobernador (2016-2021) por defraudación fiscal al no haber declarado una propiedad con valor de cuatro millones de pesos que adquirió durante su gestión, y por peculado por 98 mdp con la simulación de un contrato con una empresa que presuntamente se encargaría de dar asesoría para la reestructura de la deuda pública del estado; se pagó pero nunca se presentaron comprobantes del servicio.
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Tarde pero seguro, Movimiento Ciudadano ha iniciado una campaña de información verídica y creíble en la defensa de los votos obtenidos en las elecciones federales del 2 de junio. Ayer, en rueda de prensa, el coordinador en Michoacán, Antonio Carreño, compartió la numeralia y la chicanada que pretende la 4T con la representación proporcional para la asignación de curules.
Nada más dramático, luego de la desaparición del PRD, lo que pretenden hacer con los naranja que compitieron sin coalición: en el reparto, una curul para PT equivale a 65,094 votos, mientras que para MC representa la friolera de ¡270,725! Así de claro: MC alcanzó 10.92 por ciento de la votación, pero tendrán menos diputados plurinominales que el PT que sacó 5.47 por ciento.
Por eso andan tan encabronados.
“La sobrerrepresentación tiene límites constitucionales claros, establecidos en el artículo 54 con el objetivo de garantizar una correcta representación del pluralismo político en la integración de la Cámara de Diputados. Los partidos políticos como entidades de interés público, tienen el derecho de formar coaliciones, pero sus acuerdos no deben desconocer los derechos de la ciudadanía, porque implica un acto de simulación que constituye un fraude a la Constitución”, explicó el dirigente del Naranja.
La información es correcta, pero el problema está en que tanto los consejeros del INE como los magistrados del TEPJF están apanicados por las represalias que puedan sufrir tanto en sus carreras, como patrimonio e incluso sus vidas, que son pocas las esperanzas que actúan con probidad y ética.
Pero reitero, está en sus manos impedir que México se convierta en la Venezuela que hoy vemos, donde se persigue y masacra toda oposición y crítica. Ya lo veremos…
