Opinión| Primavera agitada… soplan aires siniestros
¿Quiénes y cómo localizaron a los 4 estadunidenses en Matamoros, Tamaulipas, desaparecidos hace algunos días?
Por: Marco Antonio Aguilar Cortés
¿Quiénes y cómo localizaron a los 4 estadunidenses en Matamoros, Tamaulipas, desaparecidos hace algunos días?
Fueron agentes estadunidenses, con aparatos de alta tecnología, y con gran rapidez.
Esos agentes, al parecer del FBI, informaron a sus jefes que la intención de los matones de ese cártel no era el secuestro, sino el asesinato, y que los altos mandos del gobierno mexicano, con su amorío de abrazos, forman parte del crimen organizado.
Siendo lo anterior una verdad sabida, el caso les llegó como anillo al dedo a varias instituciones de EU.
Ken Salazar, embajador estadunidense en nuestro país, de inmediato aseguró: “Mi prioridad es proteger a mis compatriotas en México. Hemos puesto en marcha una Web para que cualquier persona pueda subir imágenes o videos sobre lo ocurrido en Matamoros. Respetando la soberanía mexicana, desarticularemos a los cárteles”.
Decenas de congresistas de EU (republicanos y demócratas) también pretenden desintegrar a los cárteles mexicanos, igual que varios fiscales gringos; empero, sin cárteles, se seca un fuerte ingreso para México y, por ende, una gran tajada para Amlo.
Sin ese ingreso, el presidente López se quedaría sin partidarios electorales.
El gobierno de Biden entiende muy bien esa cuestión, por eso de inmediato le manda al presidente mexicano, con el realismo mágico que gusta a nuestro gobierno, 25 millones de dólares, “recurso incautado por malversación”, lo que celebra Amlo en su ingenua torpeza.
Mientras, la justicia del hampa es la que impera en México, y hasta se da el lujo de pedir disculpas.
Hay, desde finales del 2022 en nuestro país 109 mil 171 desaparecidos, según datos de la Secretaría de Gobernación, y ya nadie del mundo oficial los busca. Claro, no son estadunidenses los desaparecidos, y EU no ha hecho trabajos de tecnología avanzada ni los reclamos como ahora.
Obsérvese, rige una discriminación (inconstitucional) para los mexicanos en su propia tierra. A los estadunidenses en tres días los localizaron (dos muertos, un herido y una viva sin lesiones físicas); en cambio a nuestros connacionales desaparecidos sólo sus familiares los rebuscan; con palas, azadones y picos, deambulan por doquier, bajo amenazas y sin protección, con su dolido sentimiento de amor van cavando sobre sus propias sombras portentosas, para descubrir un México convertido en enorme cementerio.
No existe duda, los grupos criminales están más y mejor organizados que el gobierno. Fue el cártel que impera en Tamaulipas el que detuvo y entregó, amarraditos y confesos, a los supuestos o reales ejecutores de los delitos infringidos a esos 4 estadunidenses.
Y frente a ese hecho, tanto el gobierno federal mexicano como el estatal, con sus fiscales, dieron por legal la entrega, y abrieron las carpetas respectivas, judicializándolas de inmediato. No midieron las consecuencias constitucionales del caso, lo que los llevará a peligrosos tropiezos.
Para taparle el ojo al macho, nuestro tirano de Macuspana se lanza en contra del partido republicano y de los fiscales de EU, calificándoles y amenazándolos: “Qué se creen estos injerencistas, mequetrefes y prepotentes. Voy a pedir a los mexicanos que viven en EU que no voten por los republicanos”.
Mostrando Amlo, a pecho abierto, que él es más prepotente, más mequetrefe y más injerencista, que cualquier republicano.
Y que respecto a México, el presidente López es más conservador y más neoliberal que a quienes califica depravadamente de esa manera.
Cómo nombrar a quien ordenó vigilar que se cumpla su disposición para que los nuevos miembros del INE sean, exclusivamente, dogmáticos del obradorato, a través de un examen patito y tramposo.
¿Qué motiva a los de la 4T a luchar para que todo el poder de México sea ejercido por una sola persona, el tirano López?
Una agitada primavera nos espera, y empiezan a soplar aires siniestros.