Silogismos| Incierto futuro político, espera a los líderes del PRI en Hidalgo
Dice el refrán que «mal comienza la semana para quien ahorcan en lunes» y se aplica a lo que sucede en el PRI hidalguense
Candidatos/as perdedores como Benjamín Rico, le apuestan a la ilusión de ganar espacios como la alcaldía de Pachuca, pero el panorama en las elecciones del 2024 no les pinta nada bien, como tampoco a sus compañeros que no se han percatado de ser meras comparsas de dirigentes nacionales como la perdedora, Carolina Viggiano y el ambicioso Alejandro Moreno “Alito”
Por: Antonio Ortigoza Vázquez
Dice el refrán que «mal comienza la semana para quien ahorcan en lunes» y se aplica a lo que sucede en el PRI hidalguense, cuando el ex gobernador Omar Fayad Meneses y un nutrido grupo de quienes fueron destacados priistas formalizaron su ingreso al PVEM, unidos en el Grupo Plural Independiente (GPI).
Se consumó así lo que hace tiempo se anunciaba. La ruptura de Fayad con Carolina Viggiano y «Alito» Moreno se veía venir mucho antes de que el PRI perdiese la candidatura a manos de Morena, con Julio Menchaca, o más bien, la derrota fue una notoria causa de la división en el tricolor.
Este acontecimiento es sin duda un severo golpe a los restos del priismo, en donde, tal y como lo denunció Omar Fayad, «Alito» Moreno, Carolina Viggiano y Rubén Moreira, fungen como una especie de «síndicos» de una quiebra largamente anunciada.
Y como «síndicos», buscan quedarse con los restos de lo que fue un partido político todopoderoso.
Fayad lo dijo así: «Los verdaderos traidores son los que quieren acabar con lo poco que queda, para seguir secuestrando y adueñándose en pandilla de las candidaturas del PRI. Desde aquí se los dejo claro: «Alito», Carolina y Moreira serán senadores plurinominales del PRI (y) meterán a sus incondicionales como diputados o senadores por vía plurinominal, a Pablo Angulo, Añorve y Zamora».
Entretanto, Benjamín Rico, presidente del PRI en Pachuca, hace meses que se dedica a una «campaña maquillada», ya que distribuye ayudas en las zonas pobres de la capital estatal, con arreglos de calles, pavimentación, alumbrado, pintura y remodelaciones en los barrios.
Pero se sabe que dio la espalda al alcalde en funciones, Sergio Baños Rubio, a quien ha calificado como «el peor alcalde de la historia».
Lo curioso es que Rico llegó a pertenecer al círculo de amigos más cercanos del ahora ex gobernador Omar Fayad y hoy apuesta todo su capital político a Carolina Viggiano, pese a que la señora no se ha distinguido por gratificar servicios de sus equipos.
Rico pretende ser alcalde de Pachuca, aunque perdió la diputación federal (cuando gobernaba el PRI) y por si fuera poco, se ha confrontado con el alcalde Baños.
En suma: el priismo hidalguense genera chirridos por las fricciones, mientras cuadros valiosos se pasan «con armas y bagaje» al equipo rival.
Como botones de muestra, en la ceremonia, están los ahora ex priistas que formalizaron su ingreso al Verde Ecologista, nuevos cuadros a los que dieron la bienvenida Alejandro Enciso y Julio Valera Piedras, y destacan Dora Eloísa Castillo Flores, de Huejutla y lideresa del SNTE; Cornelio García Villanueva, ex panista y Estela Martínez Sanjuan, presidenta municipal de Tasquillo, además del alcalde de Pachuca, Sergio Baños Rubio.
En todo caso, de conseguir la candidatura priista, Benjamín Rico se enfrentará a uno de los varios prospectos de Morena que caminan en ese sentido y que no se ven nada fáciles de vencer, a saber: Buscan la nominación morenista para la alcaldía, Jorge Reyes, Navor Rojas, Andrés Velázquez y Ricardo Crespo.
Pero en lugar de reñir, éstos se reúnen con frecuencia para dar idea de unidad y camaradería, no de disputa ruda.
El futuro político para la cúpula priísta no pinta nada bien.