Periodistas en riesgo exigen seguridad y justicia
“Estamos ante una emergencia nacional. Los periodistas estamos solos ante un Estado fallido” Rodolfo Montes, reportero.
Por: Luz María Sánchez S.
La muerte violenta de periodistas en México ha ido en escalada. En los últimos cuatro años han sido asesinados 36 comunicadores y de ellos, 11 perdieron la vida en los primeros cinco meses de este 2022. Pero más allá de las cifras, lo más grave es la desolación que ha dejado a las familias, en medio de la tristeza, la rabia, la impotencia y el desamparo.
Por ello, las movilizaciones en todo el país de diferentes agrupaciones y colectivos no se han hecho esperar para demandar justicia, seguridad y un freno a la violencia y las amenazas contra los comunicadores.
“Nos están matando y todo porque estamos arrojando luz en los actos de corrupción de fiscales, de regidores, de un policía de tránsito, de un policía de a pie. Cuando les dices, somos periodistas, somos como delincuentes, somos como enemigos para ellos. Ya no se lo piensa para lastimarte verbal y físicamente”, así lo expresa Rodolfo Montes, reportero de “Luces del siglo”, quien ha encabezado este reclamo en diferentes foros como el Encuentro de Periodistas en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, e incluso lo ha manifestado abiertamente al presidente López Obrador en varias de sus conferencias matutinas.
En entrevista, destacó “Lo que debemos tomar en cuenta es que estamos viviendo una emergencia nacional que debe llevar a extremar nuestras precauciones, porque estamos solos; el Estado mexicano es un estado fallido para el gremio”.
Y para quienes pretenden desvirtuar estas manifestaciones en todo el país, el periodista aclaró que no son golpistas, ni apátridas, ni financiados por grupos externos, pues este movimiento, -dijo- ha surgido en forma genuina para defender al gremio periodístico, ante la necesidad de visibilizar el problema que los aqueja no sólo en estados de la República con mayor violencia, sino que ha llegado, incluso, a la Ciudad de México.
En total coincidencia con este planteamiento, el periodista Juan Bautista, presidente de la Fraternidad de Reporteros de México, sostuvo que quienes deben ser los primeros en tomar conciencia de que su vida está en peligro, ante el total abandono del Estado, son los propios reporteros, fotógrafos, camarógrafos y dueños o directivos de medios digitales.
Apuntó que las estadísticas señalan que desde hace 7 años, la andanada contra los periodistas es una realidad, pero se rompió la barrera de asesinatos mensuales, que era 1.2 por ciento, pasó a 2, y ahora se incrementó hasta 4 periodistas muertos violentamente.
Por ello, reveló que ante la indolencia del Mecanismo de Protección para personas defensoras de derechos humanos y periodistas, organismo dependiente de la Secretaría de Gobernación, las diferentes agrupaciones y colectivos exigen la renuncia de su titular, Enrique Irazoque, “por ineficiente, porque sus subalternos no están atendiendo con prontitud con eficacia la grave situación por la que estamos pasando”.
Juan Bautista, quien ha sido galardonado en varias ocasiones con el Premio Nacional de Periodismo, lamentó la actual situación de riesgo que ha dejado en total indefensión al gremio “¡Estamos en el limbo de la justicia; en el limbo de la parte legislativa y en limbo del discurso político…!”
Frente a la evidente indiferencia de las instituciones de procurar su seguridad, Bautista no descartó los riesgos que corren los periodistas en los próximos procesos electorales ya que, en la lucha por el poder, se les vuelve a colocar en la línea de fuego. “Hoy yo alerto que debiéramos establecer de inmediato un plan de seguridad para las próximas elecciones, porque ahí es donde otra vez, el crimen organizado, la iniciativa privada… tratará de que ganen sus candidatos y los que estamos en la línea de fuego llevaremos otra vez las consecuencias. Hay que alertar desde este momento que en los climas políticos encrespados estaremos pagando los platos rotos”.
Oídos sordos y discurso de odio
Si bien, los representantes de este movimiento buscan soluciones y apoyo, sin culpar directamente al Titular del Ejecutivo federal, reconocen que el Estado los ha abandonado al no escuchar los reclamos de las y los periodistas por las amenazas y abuso de autoridad en diferentes entidades del país, cuyos gobernadores, presidentes municipales y funcionarios de organismos públicos locales los han acorralado, por investigar y revelar sus prácticas de corrupción al amparo del poder.
No hay llamado de atención o restricciones a este abuso, advierte Juan Bautista: “El observador, el cronista, el reportero; el que se está encargado de dar los puntos de vista de los diferentes actores, está siendo desaparecido, silenciado, acribillado. Entonces no vemos que desde el poder haya una intención firme de atacar el problema, no de raíz como se dice desde Presidencia, si no un problema de los funcionarios que están al frente de esos organismos: del subdirector de la policía, del presidente municipal, del director de algún organismo estatal que tiene que ver con el campo, con Pemex y de ahí proviene ese señalamiento”
Los periodistas Rodolfo Montes y Juan Bautista, basados en las investigaciones de “Articulo 19” y del Alto Comisionado de la ONU, coinciden en que en los asesinatos de las y los periodistas en México existe un patrón de colusión entre el poder púbico, el narco y la delincuencia común. “Me refiero a que cuando un periodista le incomoda a un presidente municipal, él no ordena, pero él asiente, él manda una señal, alguien opera y como si le hicieran un favor al presidente municipal le quitan al periodista”, agrega Bautista.
Si bien, aclara Rodolfo Montes, cuando señala el Presidente a algún medio de comunicación o periodista en específico trata de hacer un deslinde, pero pesa más en el ánimo de los funcionarios púbicos menores, quienes toman a pie juntillas las descalificaciones a la prensa desde Palacio Nacional para lastimar y hacer daño a quien investiga o denuncia malas prácticas del ejercicio público. “Pero es muy difícil porque la clase política de nuestro país, hoy está más ávida, más necesitada de seguir corrompiendo a las instituciones de seguir desviando recursos públicos, que en atender realmente las demandas de la población”.
Desde diferentes trincheras, quienes encabezan este movimiento para visibilizar la problemática de asesinatos y desapariciones de periodistas, anuncian que la organización apenas comienza y caminarán firmes y unidos para levantar la voz a fin de que la sociedad se entere del origen de este embate contra el gremio. Así buscarán alianzas para emprender una amplia campaña que les brinde seguridad y protección no sólo de perder su vida, si no de un mejoramiento de su actividad laboral.
¡Ni uno, ni una más…!
