Paros, manifestaciones y protestas, pero protagonizados por algunos sectores que no se habían dejado oír
Por: Rosalinda Cabrera Cruz
Vaya que esta fue una semanita de paros, manifestaciones y protestas, pero protagonizados por algunos sectores que no se habían dejado oír. En todo esto tomaron parte trabajadores del sector educativo de los niveles básico, medio superior y superior y es así como se pudieron ver por ahí los muy vapuleados miembros del Telebachillerato, para ser seguidos de uno de los sindicatos del Instituto Michoacano de Ciencias de la Educación y al final los más destacables egresados de normales de la generación 2021, todos con distintos reclamos.
Por inicio de cuentas, en Palacio de Gobierno se apostaron integrantes del Suttebam, para exigir una mesa de trabajo con las autoridades educativas ante diversos pendientes. Silviano Paredes Correa, líder del gremio, apuntó que existe un oficio que envió la directora general de que ya se finiquitaron adeudos con el Infonavit, “nos dice que se finiquitó un adeudo con el Infonavit, pero es un dicho de ella, nosotros le estamos pidiendo un comprobante porque en lo personal como trabajadores solo nos dicen si calificamos para un crédito o no, más no nos dan esa información.
A su vez, en el IMCED están más baratitos, porque el sindicato no mayoritario SIATIMCED nada más pide la salida del delegado administrativo Rafael López López y que no les quiten una prestación que tienen desde hace varios años, según alegó el líder Alfredo Huerta, así que por ahorita mantienen la toma de las oficinas administrativas a manera de protesta.
Y para rematar, los egresados de la generación 2021 de las normales públicas tomaron las instalaciones de la SEE, reclamando la asignación de plazas que hasta el momento no se ha hecho ninguna, por lo que exigen una mesa de trabajo para desahogar los pendientes, asimismo reclaman pagos para otras generaciones ya contratadas. Los voceros acusaron que en la SEE no se busca dar respuesta, ni agilizar los procesos para otorgar los lugares vacantes, a pesar de la necesidad que hay del servicio, claro, esto desde su muy peculiar punto de vista.
En otro orden de ideas, la sección XVIII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantiene sus exigencias hacia las autoridades educativas federales, pero ahora en la Ciudad de México. El miércoles pasado efectuaron una marcha posterior a una reunión, en la que demandaron que sea el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, y un representante de la secretaría de Gobernación, quienes sean garantes de las negociaciones en el estado. Ante ello, y la falta de un acuerdo, mantienen un plantón afuera de la secretaría de Educación Pública (SEP) frente a Plaza de Santo Domingo, apoyados por maestros de Chiapas, Valle de México, Durango, Sonora, Veracruz y de la propia Ciudad de México. Es por ese motivo que no los hemos visto por las calles de Morelia, porque están dando lata en la capital del país.
En temas más particulares, del caso de la niña maltratada en la secundaria 4, el que fue denunciado como agresión hacia su persona por parte de sus compañeros, resultó que las investigaciones determinaron que la niña ingresó al Seguro Social por un cuadro de apendicitis y no por agresión. La difusión de esa supuesta agresión, por parte de algunos medios de comunicación, criminalizó a un centro educativo y a todo su personal, pero lo más grave es que desvió la atención del verdadero problema, porque la pequeña en realidad sí era víctima de bullying y ahora la investigación ya agarró otro camino… en fin veremos en qué para todo esto.
Otro escandalito fue el que protagonizó la comunidad educativa de la secundaria técnica 3, de Morelia, lo que dio como resultado que la SEE, en voz de su titular Yarabí Ávila González, lanzara que no se reconocerá a ninguno de los dos directores de la institución en tanto continúe el proceso jurídico para investigar a ambas partes que estuvieron involucradas en el conflicto sindical durante la última semana, por lo que entrará un tercero en discordia; lo chistoso es que a fin de cuentas, a esta persona tampoco la van a reconocer y si no lo creen, denle tiempo al tiempo. Y hasta aquí por hoy…
