YO CAMPESINO/ ¡Miente!| El ganso sabe que por su incapacidad no mejorará salud de mexicanos, empeorará
El ganso sabe que por su incapacidad no mejorará salud de mexicanos, empeorará
Por: Miguel A. Rocha Valencia/Índice Político
Como es costumbre en la 4T, no sólo viola la norma al no licitar servicios de salud y medicamentos, sino que, además, en un acto de flagrante corrupción, oculta y reserva los datos de asignaturas y facturación como si fueran de seguridad nacional. Si, así como lo hizo el ganso con los segundos pisos y el regalo de inmuebles del Centro Histórico y diversos predios, cuando fue jefe de Gobierno de la capital del país.
Se trata no sólo de dinero sino, lo más importante, la salud de millones de mexicanos a quienes se se niegan insumos y los que se otorgan, son de tan dudosa calidad que ni la Organización Mundial de la Salud los tiene autorizados como las vacunas cubanas Abdalá y Soberana, de las cuales no existe información precisa y abierta acerca de sus procesos, desarrollo y que, sin embargo, por instrucciones del machuchón de Macuspana, fueron autorizadas por Cofepris.
Ni siquiera se tiene información cierta acerca de los daños causados por la pandemia de SARS-CoV-2 en la población cubana. Tienen un número indeterminado de muertos y contagios.
Por eso cuando se habla de un sistema de salud similar al de Dinamarca, apuntamos que es una mentira, eso no se construye de un día para otro y menos destruyendo instituciones o traslapando funciones de una a otra, como sucede con el mal llamado Instituto de Salud para el Bienestar que sólo sirvió para dilapidar presupuesto en manos de un antropólogo, eliminar el Seguro Popular, dejar a 15 millones de mexicanos más sin cobertura pública-gratuita, ordeñar cerca de 35 mil millones de pesos al presupuesto de la SSA, pero sobre todo, generar más muertes por desnutrición, complicación de enfermedades crónico degenerativas. Cáncer, diabetes, cardiovasculares.
Y gracias a todo ello, la esperanza de vida de los mexicanos disminuyó en cuatro años en sólo dos de la actual administración. La ausencia de medicamentos, tratamientos, reactivos y personal para cubrir guardias, vieron vitales para que cerca de 180 mil mexicanos más fallecieran “de más”.
Entonces, cómo creer que en los dos años más difíciles, cuando el mesías tropical gastará más de 750 mil millones para comprar votos entre 30 millones de familias a las que regala pensiones, becas y “apoyos” por improductividad, lograremos tener un sistema de salud a la altura del primer mundo, como Dinamarca o Alemania, o de perdis el Care Sistem del odioso capitalismo estadunidense.
No, tal vez el parámetro del caudillo de Tepetitán sea el sistema cubano donde ciertamente la socialización para el pueblo es una y la atención para los blancos de la clase gobernante, con planes de estudios aun “sovietizados” como la chatarra agrícola que se arrumba en los campos de caña de Matanzas, Santa Clara o Cienfuegos.
Porque con eso que importamos servicios médicos y vacunas de la isla que hacen olvidar los esfuerzos nacionales por una farmacopea o inmunizaciones propios, aunque sea la mal llamada “Patria”, lo más seguro es que nos cubanicemos hasta en eso.
Ese es el parámetro del profeta de la 4T, ideologizar la medicina, hacernos que la mejor es la que oferta el Estado con todas sus limitaciones científicas y carencias medicamentosas. A eso le tira.
No hay duda, la ignorancia de otras culturas y sociedades hace pensar al tlatoani macuspanense que no hay mejor, por eso en el presupuesto de egresos de la Federación y en consecuencia de los sistemas de salud estatales, se borró el mínimo uno por ciento para investigación y desarrollo en el ramo.
Por eso sacan a los científicos del Conacyt, se eliminan becas a los estudiantes aspiracionistas que buscan perfeccionarse en el extranjero y se otorgan grados de “investigadores” a los cuates, incluyendo a la consorte real, a los amigos y los fieles a la cuarta trasformación, cuyo objetivo es depauperar al pueblo y entronizar a una clase serviles del reyezuelo que concentra en sí el poder, el dinero, la ley y la verdad.
Olvidemos entonces aquello de Dinamarca, asomémonos a la medicina cubana que por el régimen autoritario llega a ser un misterio pero que en esencia parte de la ocupación de la antigua URSS con cuya matriz Moscú sueña el ganso como una alternativa al capitalismo, ese por el cual nos desarrollamos, crecimos y aspiramos a mejores niveles de vida.