Pizarra Educativa| En la UMSNH amenazas a personal administrativo y profesorado
La rectora de la UMSNH, Yarabí Ávila González, prosiguió con las mismas acciones que caracterizaron su paso por la secretaría de Educación en el estado
Por: Rosalinda Cabrera Cruz
La rectora de la UMSNH, Yarabí Ávila González, prosiguió con las mismas acciones que caracterizaron su paso por la secretaría de Educación en el estado, en lo que se refiere a la defensa de género; así, aseguró que es necesario trabajar para que las denuncias de acoso al interior de la Casa de Hidalgo terminen en sanciones. “Necesitamos que estas denuncias generen sanciones, y es donde la universidad todavía no tiene estos dientes que yo siempre he señalado, apuntó.
Y no paró en la declaración, al amenazar con dictar el cese de administrativos o profesores cuando se confirme esta circunstancia, “pero en lo que tenemos que trabajar más es en que no haya casos, prevenir y que todo el mundo esté enterado de que hay sanciones y que no solamente son internas, sino también externas”, afirmó. Todo esto está bien, pero el discurso no es nuevo y hasta ahora han sido pocos los casos en que se ha hecho justicia.
Pero en lo que se refiere a aplicar medidas de seguridad no se ha parado, pues la Casa de Hidalgo recién adoptó a tres perritos para fortalecer las acciones de vigilancia en su campus, tras la firma de un convenio de colaboración con la asociación Generando Hogares de Amor para Animales Desprotegidos. El secretario general, Zoé Infante Jiménez, dijo que uno de los objetivos es que los caninos adoptados identifiquen posibles narcóticos o algunas sustancias prohibidas, en caso de que alguien intente ingresarlas a las instalaciones de la Universidad; esperemos que la protección también incluya la seguridad de los animalitos adoptados.
Donde siguen atrasados en materia educativa, es en lo que toca a la prevención del acoso escolar en niñas, niños y adolescentes, para lo que el gobierno del estado se encuentra formando replicadores. Siempre hemos dicho que este tema se pone sobre la mesa cuando ocurre un hecho que lamentar, como el que recientemente ocurrió en el estado de México; el discurso es harto conocido: “es prioridad del gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla combatirlo, por ello, la secretaría de Salud de Michoacán (SSM), a través de la dirección de Salud Mental, y en coordinación con las secretarias de Educación y del Bienestar, arrancan campaña denominada El bullying no está chido. Para el anuncio se hace un acto de relumbrón, pero en los hechos no sucede absolutamente nada.
El mes pasado, las unidades de género de las escuelas, institutos y facultades de la UMSNH acordaron hacerle frente al acoso y al hostigamiento y trabajar de manera conjunta con las autoridades para tomar las decisiones necesarias que impidan que la impunidad gane y se sigan lacerando derechos. El objetivo de la reunión, además de buscar a quien coordinará estos trabajos, cuyo nombramiento surgirá de propuestas de las titulares de las Unidades de Género, es para saber en dónde está parada la institución, identificar cuáles son los obstáculos a los que se ha enfrenado, cuáles son las fortalezas, cuáles son las áreas de oportunidad para que de manera conjunta se establezca el plan de trabajo. Las propuestas fueron: cultura de la paz, alto al acoso y al hostigamiento sexual, es decir, mucho discurso pero cero acciones, porque los casos de hostigamiento están a la orden del día, son de sobra conocidos y no hay castigos concretos, en pocas palabras, le dan mucha vuelta al asunto.
Sobre el mismo tema, la diputada local, Mónica Valdez Pulido, propuso ante el Congreso de Michoacán la instalación obligatoria de cámaras de vigilancia tanto en las escuelas, como en las inmediaciones de éstas con el fin de evitar riñas, conflictos, y posibles consecuencias físicas graves, entre los alumnos, aunque habría que recordar que cuando esta misma medida de aplicó en centros de estudio de nivel medio superior, los defensores de los derechos humanos brincaron, argumentando que se violaba la privacidad de los jóvenes.
En el caso de la propuesta de la legisladora, se trata de reformar el artículo 4, 143 y el 181 de la Ley de Educación, así como el artículo 8 de la Ley para la Atención de la Violencia Escolar, algo que realmente dudamos que progrese. Y hasta aquí por hoy…