Silogismos| Conflicto territorial hace peligrar acuerdos ocultos de Susana Ángeles Y Gastón Valdespino
Denuncia de Integrantes del Cabildo de Tizayuca, ante el Congreso Local en contra del cuerpo edilicio de Tolcayuca por el despojo de su territorio
* Denuncia de Integrantes del Cabildo de Tizayuca, ante el Congreso Local en contra del cuerpo edilicio de Tolcayuca por el despojo de su territorio, amenaza destapar una peligrosa Caja de Pandora contra su propia alcaldesa quien junto a su símil, han apoyado fusiones de parcelas ejidales en favor de una empresa constructora a la que en el pasado gobierno local del PRI se le dieron todo tipo de facilidades, mismas que ahora se hacen extensivas, de forma sospechosa, en el ayuntamiento de la edil morenista
Por: Antonio Ortigoza Vázquez
Cuando el pasado 19 de abril once integrantes del Cabildo de Tizayuca se presentaron al Congreso Local para señalar con dedo flamígero a los integrantes del Ayuntamiento de Tolcayuca como responsables de adjudicarse de manera ilegal territorio de su municipio con el apoyo de su edil, Gastón Valdespino, no calcularon que la petición de juicio político a los presuntos culpables, terminará por involucrar también a su propia alcaldesa, Susana Ángeles Quezada, quien desde abril del 2021, buscó de manera insistente de su propio cuerpo edilicio, la aprobación de límites territoriales para no entorpecer los permisos en la aprobación de la segunda etapa de un proyecto habitacional de 2 mil 68 viviendas que involucra a ambas demarcaciones, hoy en disputa.
El conflicto ya reventó en la opinión pública del Estado y perfila a transformarse en una Caja de Pandora que podrá echar abajo los proyectos de la alcaldesa y sus padrinos políticos, entre estos el Grupo Universidad y viejos priperredistas como José Guadarrama Márquez, que buscan impulsar a Ángeles Quezada como candidata al Senado para después lanzarla a la gubernatura.
Como se están alineando los hechos, parece imposible que la edil Ángeles Quezada como su homólogo de Tolcayuca, finjan haber ignorado los antecedentes de la millonaria inversión inmobiliaria que desde trienios anteriores venía impulsando en la región la firma “Arrendadora Cesvin” Sociedad Anónima de Capital Variable, empresa que en agosto del 2020 y siendo alcalde de Tizayuca el priísta Gabriel García Rojas, obtuvo la entrega recepción y autorización de redes hidráulicas, sanitarias y pluviales para su Sección “Sevilla” de su Fraccionamiento “Andalucía Residencial”.
A la citada compañía, ubicada como de las consentidas en el pasado sexenio donde gobernó el PRI, parece que los vaivenes políticos no le inquietaron en lo absoluto. Y la llegada de una candidata de Morena al gobierno de Tizayuca en diciembre del 2020, no resultó impedimento alguno para seguir adelante con nuevas etapas de crecimiento en su proyecto habitacional, en este caso la ampliación llamada “Andalucía 2da Etapa”.
Tras realizar un acucioso análisis de los documentos que exhiben la serie de irregularidades sobre la fusión de predios, motivo de la sustracción de territorio a Tizayuca y por el cual ingenuamente los miembros de su Cabildo se rasgan las vestiduras, se fortalece la presunción de que tanto Gastón Valdespino como Susana Ángeles, conocían de los propósitos de la ampliación en el proyecto habitacional y los problemas que tal situación podría acarrear en un eventual desacuerdo con los ejidatarios. No obstante esto, siguieron adelante.
La alcaldesa con su “corazón” en Tolcayuca
Veamos el por qué:
Apenas a cuatro meses de haber tomado posesión, la nueva edil de Tizayuca convocó el 23 de abril a su cuerpo edilicio para celebrar la Décima Sesión Ordinaria en cuyo punto seis de la orden del día se señalaba:
“La aprobación de la propuesta del acuerdo económico para que la H. Asamblea Municipal autorice a la Presidenta Constitucional Susana Ángeles Quezada, así como al Síndico Jurídico Gabriel González García, para suscribir el convenio de fijación de los límites territoriales entre los municipios de Tizayuca y Tolcayuca, Estado de Hidalgo, con fundamento en el artículo 60, Fracción I, Inciso F, así como el artículo 68 de la Ley Orgánica para el Estado de Hidalgo”.
Por mayoría, los miembros del cabildo –ocho votos a favor, cuatro en contra y 19 abstenciones–, no aprobaron la intención de la alcaldesa.
Dos meses después en junio, Susana Ángeles, hizo dos nuevos intentos para que su cuerpo edilicio le aprobara firmar el convenio para fijar nuevos límites territoriales con el vecino ayuntamiento de Tolcayuca.
¿Pero por qué era tanta la premura de la alcaldesa en vez de avocarse a la defensa del territorio de su municipio?
Del otro lado de la moneda, el 14 de abril, en la Cuarta Sesión Extraordinaria de Cabildo, en el municipio de Tolcayuca, las cosas fueron totalmente opuestas, de acuerdo a lo planteado en su punto seis, se establecía: “Propuesta y en su caso, aprobación del H. Ayuntamiento para que de acuerdo a la ubicación en que se encuentran algunas parcelas que conforman al ex Ejido de Tizayuca, se reconozca que las mismas se encuentran dentro de la demarcación territorial del municipio de Tolcayuca, Hidalgo”.
En el uso de la voz se asentó en el acto, las palabras del munícipe priísta, Gastón Valdespino Ávila, que dijo… “advertimos que hoy en día existe la necesidad de tomar una determinación con respecto a algunas parcelas pertenecientes al ex ejido de Tizayuca, mismas que se ubican dentro de la Comunidad General Felipe Ángeles”.
Según lo dicho por el alcalde de Tolcayuca, tales terrenos se encontraban indebidamente inscritos en el Padrón Catastral de Tizayuca, por lo que tales derechos deberían pasar a su ayuntamiento. A diferencia del Cabildo de Susana Ángeles, el de Valdespino si le aprobó la propuesta. Y el 17 de julio del 2021, tal resolución adoptada por acuerdo del cuerpo edilicio tolcayuquense, fue publicado en el Diario Oficial del Estado de Hidalgo, validando así su legalidad.
No debe pasarse por alto que por esas fechas, el gobierno del Estado aún estaba controlado por el PRI, del cual la empresa constructora no tuvo problema alguno en la obtención de los permisos tantos municipales como estatales. De ése tamaño eran los acuerdos pactados con la inmobiliaria y los ahora ex funcionarios.
La actitud de alentar una fusión que facilitara las cosas a “Arrendadora Cesvin”, era explicable en el caso del edil priísta de Tolcayuca, pero ¿por qué el interés en el mismo sentido de una alcaldesa de Morena? ¿Es acaso que desde su campaña al gobierno de Tizayuca existía un acuerdo a valores entendidos de ciertos apoyos en su campaña, como ya se especula?
Sigamos el hilo conductor: El 16 de abril del 2021, el Notario Público Número Tres de Pachuca, estableció en la escritura pública 88 334, la fusión de predios ubicados en lo que fue el Ejido de Tizayuca, con una superficie de 412 mil 526 819 metros, el equivalente a poco más de 41 hectáreas, a favor de la sociedad “Arrendadora Cesvin”. Los terrenos necesarios para la ampliación inmobiliaria de la empresa en cuestión.
No pasa desapercibido que esta operación se realizó justo siete días antes del primer fallido intento de Susana Ángeles para establecer los nuevos límites territoriales; esto es 23 del mismo mes. Y solo dos días después de la luz verde aprobada por el cabildo de Tolcayuca a su edil, el 16 de abril.
Será interesante saber si los miembros del Cabildo que presentaron su inconformidad ante el Congreso Local, detallaron en su querella que taL fusión quedó también inscrita en la Oficina Registral de Tizayuca, de fecha 5 de julio del 2021, parece saber por qué la alcaldesa no los instó desde hace dos años a inconformarse con tan evidente irregularidad, incluida ella misma.
Ante la inconformidad de algunos ejidatarios, se realizaron del 9 al 28 de septiembre del 2021, en Tizayuca, diversas mesas de trabajo entre regidores, funcionarios municipales y diversas organizaciones, donde se demostró que los terrenos adjudicados en la fusión al municipio de Tolcayuca, no contaban con los antecedentes históricos, ni jurídicos y menos registrales para transferirlos al vecino municipio, razón por la que decidieron iniciar por su cuenta un juicio de nulidad administrativa ese mismo mes.
Susana y Gastón firmaron de mutuo acuerdo ante INFONAVIT
Pero lo grave del asunto es que sus justificadas inconformidades fueron llamadas a misa para su presidenta municipal porque lejos de entrar en discusión con su símil de Tolcayuca, firmó a la par con este un documento fechado el primero de junio del 2022, donde informaban al delegado del INFONAVIT en Hidalgo, Oscar Eduardo Gallegos Ramírez, que el suministro de agua potable para su sección denominada La Rioja, del conjunto habitacional Andalucía Residencial, “ubicado dentro del municipio de Tolcayuca”, sería suministrado por la Comisión de Agua y Alcantarillado del Municipio de Tizayuca (CAAMATH).
Al final del documento, cuya copia como otras muchas del expediente en cuestión obran en poder de este medio, aparecen las rúbricas de Susana Ángeles Quezada y Gastón Valdespino Ávila.
Brinca la natural duda: ¿Por qué la alcaldesa siguió adelante con los permisos y proyectos inmobiliarios relacionados con la fusión de los terrenos de la constructora cuando ni siquiera contaba con la autorización de su cuerpo edilicio? ¿Qué la motivó a apoyar de facto lo autorizado por el Cabildo de Tolcayuca, pero no así el suyo propio?
Otra prueba que acrecienta las sospechas de un tácito acuerdo con la alcaldesa, es el oficio dirigido a Ismael Banderas Peñaloza, representante legal de la “Arrendadora Cesvin”, por parte del Director General de la CAAMATH, Rodolfo Rodríguez Rivero, de fecha 15 de julio del 2022, donde ratifica que otras 292 viviendas de la Sección La Rioja, son “susceptible del servicio agua potable y alcantarillado”.
Como se observa, los trámites y demás permisos otorgados por ambos ayuntamientos siguieron su curso como si no pasara nada. Y lo más delicado para los intereses de los habitantes de Tizayuca, era, y lo sigue siendo, que su edil ha actuado sin el aval de su cabildo, dotando de agua a un municipio que desde hace décadas padece por la falta de pozos, lo que le imposibilita para autorizar proyectos habitaciones de gran dimensión, como lo es el caso de Tolcayuca, gobernado por un político priísta afecto a los negocios no muy transparentes y que ahora deberá demostrar sus supuestos argumentos para birlar 40 hectáreas al territorio de Tizayuca.
Tras ser llevada la controversia al Congreso de Hidalgo, el asunto terminará por exhibir los poderosos intereses del Cártel Inmobiliario en Tizayuca que ha venido denunciando Expediente Ultra, pues ahora sucede que mientras la Secretaria Municipal, Citlali Lara, enfila sus empeños oficiales en buscar adjudicarse propiedades de manera indebida, está mostrando su inocultable ineptitud y desinterés jurídicos para defender los intereses de la sociedad de Tizayuca.
“Amarillismos” contundentes
La funcionaria fue defendida de manera pública por Susana Ángeles, tras la publicación en este medio de su plaza como docente en la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), Campus Teotihuacán, por la que viene dobleteando en ingresos a la par de su cargo en el gobierno municipal. La edil calificó de amarillista la información, pero los hechos demuestran ahora que a quien dos amos sirve, con uno queda mal.
Por cierto que en su reciente visita a Singapur –como parte de su turismo político que presume en redes sociales—Susana Ángeles dijo haber aprendido de aquel país sobre su “planificación urbana y arquitectura” para transformar sus ciudades y atender las necesidades básicas de sus habitantes. La edil dijo que tal experiencia “nos retroalimentó sobre el modelo de desarrollo urbano que contemplamos para Tizayuca”.
¿Se habrá enterado la alcaldesa que en Singapur algunos delitos como el tráfico de drogas y la corrupción se castigan con pena de muerte, y que por tanto en ese país modelo a nivel mundial, no se consiente la existencia de Cárteles Inmobiliarios?
Lo bueno en tal sentido para ella y sus apoyadores del Grupo Universidad y ex priístas como Pepe Guadarrama, es que en México no se ha llegado a tales extremos, pero no debe confiarse porque Gerardo Sosa Castelán ya experimentó que la 4T sí castiga a los corruptos y muchos fieles seguidores de la “Sosa Nostra”, continúan en la mira de las autoridades federales, siendo los mismos que le apuestan para llevarla al Senado por las siglas de Morena y de manera emergente por las del PT.
Solo que ahora con la exhibición pública del pleito territorial entre Tizayuca y Tolcayuca, todo puede venirse abajo, demostrando que la fabricación de honestidades es el deporte favorito de Susana Ángeles, pero también de los consumados demagogos que no deben tener cabida en Morena.